De vuelta en el puerto de Sharm el Sheikh después de una semana inolvidable. Y es que los inviernos en el Mar Rojo son una auténtica gozada; el mar ha estado en absoluta calma durante toda la semana y nos ha permitido realizar buceos de lo más relajantes.

Hemos disfrutado de una semana de buceos en la que prácticamente hemos estado solos. El Parque Nacional de Ras Mohammed y el Estrecho de Tirán nos regalaron varios buceos de escándalo, donde vimos tortugas, rayas y todo tipo de peces de arrecife. El SS. Thistlegorm nos recibió con tres buceos sin corriente y con una visibilidad de diez.

También tuvimos un sorprendente encuentro con delfines jorobados, tras salir de una de nuestras inmersiones favoritas, Small Crack. Aunque siempre se muestran algo tímidos, todos pudimos disfrutar de su compañía.

Pero como siempre, lo mejor de la semana ha sido poder compartirla con este grupo tan variado, donde desde el primer momento, saltó la chispa y se formó una piña de buen rollo y diversión.

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